rumoresque senum seueriorum
omnes unius aestimemus assis.
Soles occidere et redire possunt:
Vivamos, Lesbia mía, y amemos,
y los rumores de los viejos más severos
todos en un as estimemos.
Los días pueden morir y renacer:
nobis, cum semel occidit breuis lux,
nox est perpetua una dormienda.
Da mi basia mille, deinde centum,
dein mille altera, dein secunda centum,
deinde usque altera mille, deinde centum.
para nosotros, una vez muera la breve luz de la vida,
una noche durmiendo será perpetua.
Dame mil besos, después cien,
otros mil, luego, por segunda vez, cien,
luego hasta otros mil, y otro cien una vez más.
Dein, cum milia multa fecerimus,
conturbabimus illa, ne sciamus,
aut nequis malus inuidere possit,
cum tantum sciat esse basiorum.
A continuación, cuando hayamos alcanzado muchos miles,
revolvámoslos hasta confundirlos,
y no pueda malvado alguno envidiarnos
al enterarse de cuántos besos han sido.
(Traducción de David Alexis Arboleda)
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